Banco Santander lanza una nueva sociedad de capital riesgo (SCR) enfocada en la transición energética dirigida a sus clientes de banca privada. Lo hace junto a su socio desde el pasado mes de abril EIT InnoEnergy, el motor de innovación en materia de energía sostenible respaldado por el Instituto Europeo de Innovación y Tecnología (EIT, por sus siglas en inglés). Lo ha denominado Santander Innoenergy Climate VC II y ya ha remitido su inscripción a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Al frente ha colocado a Santiago Gil y Gil, director senior de inversiones en Santander Asset Management (AM) especializado en venture capital y tecnologías limpias (clean tech). El experto aterrizó en el grupo hace apenas unas semanas. Hasta el pasado mes de julio era el responsable de Corporate Venture Capital de Enagás, compañía de la que formó parte durante casi ocho años. Previamente también fue gestor de carteras y enfocó sus tareas en la inversión y aceleración de startups energéticas que ayudaran a la firma que dirige Arturo Gonzalo Aizpiri a diversificar su negocio.
Junto a Gil y Gil también han sido designados socios de esta nueva sociedad Giovanni Bologna, inversor de capital riesgo en firmas cuyo negocio tiene un componente digital o aquellas que tratan de convertir las industrias tradicionales en otras más eficientes; así como Elisa de Mollinedo, analista senior legal en Santander AM. Antes de unirse al banco con sede en Boadilla del Monte, Mollinedo fue socia en el departamento bancario de Linklaters. Caseis Bank ha sido elegida como entidad depositaria.
Para Banco Santander contribuir a la transición hacia una economía más verde es una de sus prioridades estratégicas, por lo que las nuevas soluciones comerciales y alianzas son cruciales. La nueva SCR se enmarca, de hecho, en el contrato estratégico a largo plazo que la entidad firmó con EIT InnoEnergy a finales del pasado mes de abril. El objetivo de esta colaboración era ayudar a acelerar el desarrollo de la cartera de startups de EIT InnoEnergy con el fomento de la inversión, cubrir necesidades de formación y desarrollar soluciones creativas como apoyo a las innovaciones sostenibles.
El banco ha identificado seis tecnologías para las que tiene intención de convertirse en asesor y prestamista de primera línea para impulsar la transición energética: hidrógeno verde, almacenamiento de energía, combustibles ecológicos y energías renovables, entre otras. También cuenta con experiencia en banca corporativa y minorista en los sectores industrial y energético. Su compromiso es movilizar 120.000 millones de euros de financiación verde hasta 2025 y 220.000 millones de euros hasta 2030. Desde 2019, ha canalizado 74.400 millones.
La cartera de EIT InnoEnergy, que cuenta ya con tres unicornios, necesita 160.000 millones de euros de financiación adicional en los próximos cinco años. Cuatro de las 300 compañías que conforman la cartera de EIT InnoEnergy ya han trabajado con Santander con buenos resultados a la hora de acelerar su actividad para atraer inversores estratégicos y obtener recursos financieros para acelerar su crecimiento.
El volumen de activos bajo gestión en inversión socialmente responsable de la entidad presidida por Ana Botín se sitúa en 30.079 millones de euros. El grupo destaca su actividad en banca mayorista y recuerda el préstamo verde de exportación por 1.000 millones de euros concedida a Iberdrola cuyos fondos se destinarán a la adquisición de turbinas para parques eólicos en Europa o su participación en la emisión de bonos verdes para el ICO y la Junta de Andalucía, por valor de 500 millones de euros cada uno.
