La parroquia ha interpuesto la correspondiente denuncia, según ha informado el Obispado de Bilbao en un comunicado, pero "el daño contra el patrimonio histórico, artístico y espiritual es grave", aseguran.
El párroco de Andra Mari, Iñaki Jauregi, ha expresado su "gran pesar e indignación" por el ataque vandálico. "Hoy por la mañana noshemos encontrado con la imagen de San Pablo en el suelo y rota. La cabeza está partida en dos y no sabemos si se podrá restaurar", ha indicado.
Asimismo, el obispo de Bilbao, Mario Iceta, natural de Gernika, ha sido informado y, junto con su pesar por lo que haconsiderado "un acto grave de vandalismo", ha solicitado de los servicios diocesanos de Patrimonio, que "se evalúe en detalle el daño causado, se notifique el hecho a las autoridades competentes, se estudie a la mayor brevedad la restauración de la imagen y se analicen posibles medidas para prevenir actos" de este tipo.
No es el primer ataque que registra la iglesia gernikesa. En 2013 rompieron la base de la imagen de la Virgen y un año después se llevaron la cabeza de la figura.
La portada norte de la iglesia de Gernika, localidad que se encuentra estos días en fiestas, sigue un modelo arquitectónico muy divulgado desde el siglo XIV y durante todo el XV, con ejemplos en Bizkaia como los templos de Erandio, Mungia, Loiu, Sestao, Axpe de Busturia, Markina. Sin embargo es, junto a Lekeitio, la única que presenta decoración escultórica.
ESCULTURAS DESAPARECIDAS
La portada de Gernika fue realizada en 1449 por Sancho de Emparan, escultor que también es autor de la portada de la iglesia de San Bartolomé de Olaso, en Elgoibar (1459), y según algunos autores, también de la de Lekeitio.
"No hay muchas portadas ilustradas, así que se trata de unpatrimonio escaso, y por ello mismo más valioso", ha detallado el director técnico del Museo de Arte Sacro, Juan Manuel González Cembellín.
El experto ha señalado que varias imágenes de la portada de Andra Mari de Gernika han ido desapareciendo "en momentos desconocidos" a lo largo del tiempo, como ocurrió con la imagen de la Trinidad y la de San Sebastián, además de la cabeza del Niño.
Sin embargo, "el proceso se está acelerando en estos tiempos, de forma deliberada, y con un trasfondo que no sabemos si está caracterizado por algún tipo de integrismo ideológico o essimplemente vandálico", ha remarcado.
Tras la recuperación de los trozos, el siguiente paso será "estudiar la posibilidad de restaurar la pieza y devolverla a su lugar de origen", ha precisado el Obispado de Bilbao.
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