Rabat.- La bailaora y coreógrafa española Rafaela Carrasco arranca esta semana los aplausos de los escenarios de Marruecos en una gira que la ha llevado a las principales ciudades el país, "un lugar maravilloso" para dar a conocer su flamenco innovador.
En una entrevista con Efe poco antes de triunfar ante cientos de espectadores que llenaban anoche el Teatro Nacional Mohamed V de Rabat, Carrasco confesó que en cada uno de sus espectáculos se da la libertad de buscar en otros géneros artísticos, ya que "el flamenco, a veces, me limita".
Para la bailaora sevillana, considerada una de las más importantes de la escena de vanguardia española, el flamenco es un punto de partida desde el que buscar la forma de expresarse: "Dependiendo del espectáculo que haga, puedo recurrir a cualquier tipo de música, o a cualquier tipo de movimiento", detalla.
Carrasco empezó a bailar con tan solo seis años antes de llevar su concepción de esta danza por medio mundo y reivindica que, dentro del mismo género, existe "un abanico de posibilidades y sentimientos muy diversos", que permiten canalizar tanto lo bueno como lo malo.
En los últimos días, la bailaora ha actuado por primera vez ante el público marroquí, con el montaje "ConCierto Gusto", en el que la acompañan los cantaores Antonio Campos y José Antonio Núñez "El pulga", el percusionista Odei Lizaso, y Juan Antonio Suárez "Canito" a la guitarra.
Carrasco destacó que los espectadores marroquíes han dado "una acogida muy buena" a "un espectáculo que no tiene hilo argumental, es solamente cante, baile y música", pese a no tratarse de flamenco convencional, y defiende que se dé a conocer esta visión "quizá más actual" del género.
Aunque se trata de una propuesta escénica en la que hay "momentos de todo", Rafaela Carrasco resaltó que "bailar por soleás o bailar por granaínas, que son palos muy profundos, te llevan a un lugar muy intenso, muy profundo y personal".
La capital de Marruecos es la penúltima etapa de una gira que ya ha llevado a Carrasco y a los músicos y cantaores que la acompañan a las ciudades de Tánger, Tetuán, Marrakech y Casablanca de la mano de los Institutos Cervantes del país.
La última actuación de la bailaora en Marruecos será hoy en el marco del Festival de Flamenco de Fez, que se celebra hasta el 9 de abril, cuya primera edición pone especial énfasis en el papel de la mujer en esta danza y música.
"En el cante flamenco hay muchas cosas semejantes con la canción árabe. Seguramente vengamos del mismo lugar", dice Carrasco, que cree que en Marruecos esta forma de expresión se puede entender muy bien porque comparte raíces con la tradición musical del país.
Y es que, desde su primer contacto con la realidad marroquí, la bailaora andaluza notó una fuerte proximidad cultural y se muestra convencida de que el reino magrebí es "un lugar maravilloso" para que se dé a conocer el flamenco.
Xavier Parrilla.
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