Los disturbios de Londres dejan tocada a la cultura

Cuando hace dos días el edificio que Sony ocupaba en Londres sucumbía pasto de las llamas nadie podía presagiar las consecuencias que esto tendría para el mundo de la música. Se sabía que las pérdidas económicas serían muchas, pero ha sido ahora cuando han empezado a salir a la luz las secuelas de aquel incendio. De momento, los primeros afectados reconocidos han sido los componentes del grupo Arctic Monkeys. La banda estaba lista para sacar al mercado su nuevo single, The Hellcat Spangled Shalalala.

La idea era ponerlo a la venta el próximo 15 de agosto. Sin embargo, eso no podrá ser. Al menos físicamente, ya que la mayoría del stock se encontraba alojado en ese edificio del barrio londinense de Enfield que ardió. Solo unas pocas unidades en vinilo se venderán a través de la página web del grupo. A los fans les consuela la posibilidad de adquirirlo en formato digital.

Arctic Monkeys no han sido los únicos afectados. El trabajo de la cantante Adele, cuyo segundo disco estaba en marcha, también ha corrido la misma suerte. Y con ellos, un sinfín de nombres más anónimos que han visto su futuro truncado. El incendio ha supuesto un duro golpe para la música indie, ya que en aquellos 20.000 metros cuadrados también se alojaban las existencias de 150 sellos independientes. Para paliar los daños, los seguidores de este tipo de música han puesto en marcha la campaña LabelLove. Intentan recaudar dinero para los afectados.

En otros ámbitos, como el teatral, los disturbios han supuesto la cancelación de representaciones en varias salas. Aunque de momento no han afectado a la programación del famoso West End londinense, hay teatros de otras zonas y barrios como Landor, Arcola, Union y King's Head que han visto cancelados sus espectáculos por las revueltas.

En el cine, el rodaje de la versión de Blancanieves (Snow White and the Huntsman) que protagoniza Kristen Stewart se encuentra paralizado. El equipo se había trasladado a la capital para grabar, pero el estallido de violencia ha frenado sus planes. Dicen que tanto Stewart como uno de sus compañeros de reparto, Chris Hemsworth, han sido trasladados a áreas rurales para mantener su seguridad, de la que se encargan seis agentes de policía. No se sabe aún si este retraso afectará a la fecha de estreno, marcada para mediados del próximo año. Todo dependerá de lo que tarden en regresar la calma y la normalidad a las calles de Londres.

Y aunque no ha tocado a su música, Liam Gallagher (del grupo Oasis) también se ha visto afectado por la compleja situación. La tienda de ropa que abrió el pasado mes de diciembre en Manchester fue saqueada y destrozada cuando los disturbios salieron de Londres y se extendieron a otras ciudades del país.