"Si no, no veríamos ya más carreras sino procesiones", advirtió el patrón de la FIM en una entrevista a la AFP, lamentando sin embargo que "demasiadas personas hayan avivado el fuego" tras el incidente entre el doble campeón del mundo español y el veterano italiano, candidato a un octavo título mundial en la categoría reina el domingo.
Tras su mano a mano con Márquez (Honda), en el Gran Premio de Malasia, el 25 de octubre, fue Rossi, 36 años y ya nonuple campeón del mundo, con siete de sus nueve títulos en la categoría reina, quien fue juzgado culpable de la caída de su rival.
Sancionado por "conducta irresponsable", partirá en última posición en la parrilla de salida el domingo, un lugar que podría costarle el título, ya que solo tiene siete puntos de ventaja en la clasificación general sobre su compañero y rival español en Yamaha, Jorge Lorenzo.
Si Ippolito afirma que "el deporte debe salir vencedor del Gran Premio de Valencia, el domingo", con "lealtad y respeto de los valores", ve también más allá que este fin de temporada y planea evoluciones en los reglamentos para el año próximo.
"Vamos a efectuar cambios en los reglamentos desde el año próximo", reveló el presidente de la FIM, deseando revisar el automatismo existente en las sanciones.
"Actualmente, nuestro sistema se parece al de carné de conducir por puntos, con las desigualdades que suscita. Un hombre borracho es penalizado por exceso de velocidad de la misma manera que un marido lleva de forma urgente al hospital a su mujer a punto de dar a luz. En las carreras debemos evitar que la sanción sea automática", explicó.
Concretamente, y desde hace tres temporadas, la dirección de carrera puede quitar de 1 a 10 puntos a los participantes según las faltas cometidas, puntos que pueden acumularse por un período de 365 días.
Por ejemplo, acumular 4 puntos, lo que le ocurre ahora a Rossi tras sus tres de sanción por su choque con Márquez, le obliga a partir del fondo de la parrilla, 7 puntos significa una salida desde los boxes y 10 una prohibición al piloto de presentarse a la carrera siguiente o anular su actuación si ésta tuvo lugar en el último Gran Premio de la temporada.
"Esta reglamento ha sido creado y aceptado por todas las partes para resolver algunos problemas, como evitar la fuga de los jóvenes pilotos, pero creó otros", lamentó el patrón de la federación: "De hecho desearíamos levantar el lado sistemático de estas sanciones y analizarlas caso por caso".
"Felizmente, tenemos muchas cámaras en los circuitos y las imágenes ayudan mucho a los comisarios, ya muy experimentados, pero como en todos los deportes, hay una gran parte de subjetividad en las tomas de decisión", añadió.
Y "el análisis de un adelantamiento tiene que ser fino", insiste, sin hablar de la caída de Márquez, provocada, según su escudería, por una patada de Rossi.
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