Vitoria.- El Caja Laboral visita mañana al Cajasol con la intención de darse un baño de autoestima y confianza que le haga olvidar las cinco derrotas consecutivas que ha enlazado en la Euroliga.
Los de Ivanovic esperan mostrar en la pista sevillana la versión de la ACB donde los vitorianos son los líderes en solitario de la liga, algo que no tiene nada que ver cuando juegan más allá de los Pirineos.
La diferencia entre estas rachas opuestas reside en la diferencia de intensidad de la ACB a la Euroliga y es ahí donde quedan al descubierto las carencias que todavía tiene la plantilla del Baskonia.
La plantilla vitoriana acude al completo para medirse a los de Joan Plaza, pero no todos los hombres que dispone Ivanovic están en condiciones de aportar sus mejores prestaciones.
Marcus Haislip llega con diez puntos en el interior de su boca después de un codazo recibido en el duelo europeo ante Prokom que sólo le permitió jugar siete minutos ante los polacos.
Otros hombres como Oleson, Logan o Bjelica siguen sin terminar de alcanzar su velocidad de crucero y esto obliga al montenegrino a emplear una rotación de siete hombres con los que sacar adelante los partidos.
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