Lisboa, 12 jun.- El presidente de la Liga Portuguesa de Fútbol Profesional (LPFP), Mário Figueiredo, logró ser reelegido en unas elecciones marcadas por la polémica, con candidaturas anuladas y amenazas de impugnación.
Según el recuento oficial divulgado hoy, la lista encabezada por Figueiredo -la única que fue autorizada a presentarse- recibió el voto a favor de apenas siete clubes, cuando a los comicios estaban llamados más de una treintena de equipos, que en su inmensa mayoría no participaron.
Las candidaturas de Fernando Seara y Rui Alves, que pretendían disputarle la presidencia a Figueiredo, no fueron aceptadas por la Mesa de la Asamblea General de la LPFP por defectos de forma, lo que dejó a Figueiredo como única opción.
Varios clubes solicitaron la anulación de los comicios por considerar que la lista del actual presidente también presentaba irregularidades, pero su demanda no fue atendida, por lo que ahora estudian la posibilidad de recurrir ante los tribunales para impugnar su resultado.
El presidente del Académica de Coimbra, José Eduardo Simoes, aseguró que esta elección "avergüenza al fútbol portugués", y su homólogo en el Estoril, Tiago Ribeiro, lo calificó de "golpe" contra los intereses de la mayoría.
Figueiredo, por su parte, lamentó que "los de siempre hayan intentado por todos los medios sabotear" su reelección y se mostró satisfecho por la victoria.
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