Cilsa, la sociedad que gestiona la zona de actividades logísticas (ZAL) del Puerto de Barcelona, invertirá hasta 200 millones de euros entre este año y 2020 en construir 450.000 metros cuadrados de nuevas naves logísticas, desarrollando el 100% del suelo disponible.
Así lo han explicado este miércoles en rueda de prensa el presidente del Puerto de Barcelona y de Cilsa, Sixte Cambra, el director general de Cilsa, Alfonso Martínez, y el consejero delegado de Merlin Properties, Ismael Clemente.
Los 200 millones de euros procederán de recursos propios de la compañía, de la capitalización de un préstamo participativo de 20,5 millones por parte de los accionistas y de 75 millones de financiación externa tras el préstamo firmado con el Banco Europeo de Inversiones (BEI).
Las naves adoptarán medidas de eficiencia energética como el uso de energías alternativas, la mejora de la calidad ambiental interior, la eficiencia en el consumo del agua y la selección de materiales reciclados, lo que permitirá obtener una certificación Leed de todas ellas.
Cilsa, que está participada por el Puerto de Barcelona (63%), Melin Properties (32%) y Sepes (5%), ha cerrado el ejercicio 2016 con un beneficio neto de 5,2 millones de euros, un ebitda de 19,9 millones, unos ingresos totales de 40,7 millones y una deuda financiera neta de 102,1 millones.
PRIMER DIVIDENDO EN 2019
Además, los planes de la compañía son poder doblar el ebitda actual en 2022, hasta unos 40 millones de euros, e iniciar una política de retribución al accionista con la distribución de un primer dividendo en 2019: "La idea es empezar con un dividendo bajo, que sea sostenible y que vaya creciendo hasta llegar al máximo que podamos dar".
Martínez ha atribuido estos resultados a que la ocupación media de naves logísticas durante todo el año se situó en el 96,4% --un 97,2% a finales de 2016-- y a la contratación de 162.000 metros cuadrados, un 24% más respecto a 2015, y de éstos 22.500 metros cuadrados corresponden a nuevos contratos y 139.500 a contratos renovados.
NUEVA NAVE DE CARREFOUR
La superficie total construida de la ZAL es de 635.280 metros cuadrados, de los que Cilsa gestiona 403.000, y otros clientes, como Damm o Marmedsa, los 232.000 restantes, y la inversión del año pasado alcanzó lo 16,9 millones, que se destinó principalmente a la nave de Carrefour, que se inaugurará el 22 de mayo, y a otra nave en construcción que se entregará en verano a un cliente que Martínez no ha querido desvelar.
En concreto, Cilsa ha invertido 12 millones de euros en la nave de Carrefour, un almacén de 18.200 metros cuadrados destinado a congelados y refrigerados que permitirá distribuir más rápido a los supermercados de la cadena, y la segunda nave, de 'crossdocking' y de 16.900 cuadrados, se ubica en la parcela BZ2, en la ZAL Puerto-Ciudad, sobre 54.000 metros cuadrados de superficie.
Actualmente, Cilsa está negociando la construcción de 150.000 metros cuadrados de contratos llaves en mano con clientes internacionales del sector textil, la gran distribución, transitarios y comercio electrónico.
Martínez ha destacado que todo ello permitirá configurar un parque logístico de un millón de metros cuadrados de naves dentro de la primera corona logística de Barcelona, convirtiendo al enclave portuario barcelonés en un 'hub' logístico de referencia en el sur de Europa.
Ésta ha sido la primera presentación de resultados en la que ha participado Clemente, ya que Merlin Properties se ha incorporado a la compañía tras comprar a finales de 2015 el 32% que tenía Saba.
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