El PSOE dice que "no existe razón objetiva" para el cierre de Suzuki en Gijón

  • El portavoz de grupo socialista en el Ayuntamiento de Gijón, Santiago Martínez Argüelles, ha opinado hoy que "no existe ninguna razón objetiva" que explique por qué la multinacional nipona Suzuki ha decidido cerrar su planta de motocicletas en la ciudad y trasladar su producción.

Gijón, 12 nov.- El portavoz de grupo socialista en el Ayuntamiento de Gijón, Santiago Martínez Argüelles, ha opinado hoy que "no existe ninguna razón objetiva" que explique por qué la multinacional nipona Suzuki ha decidido cerrar su planta de motocicletas en la ciudad y trasladar su producción.

En estos términos se ha expresado el líder de los socialistas gijoneses en una rueda de prensa tras mantener un encuentro con los representantes del comité de empresa de la fábrica.

Según ha dicho, la planta de Suzuki "merece seguir produciendo en Gijón por varios motivos, entre los que ha destacado el "profundo conocimiento" que tiene la plantilla de las técnicas de producción más avanzadas, además de por su capacidad de adaptación.

"Son personas dispuestas a aprender en todos los tramos edad", ha indicado antes de asegurar que es una plantilla que "estaba dispuesta a asumir sacrificios en sus condiciones de trabajo y merece seguir trabajando".

Martínez Argüelles ha explicado además, al haber estado tanto tiempo sometida a expedientes de regulación de empleo, las prestaciones que le quedarían a los trabajadores en el caso de despido "serían muy pequeñas y, en algunos casos, inexistentes".

Por su parte, el miembro del comité de empresa Gustavo de la Cruz ha indicado que, en estos momentos, los trabajadores están esperando a que la empresa les llame para hablar respecto al plan social, aunque ha señalado que lo que quieren es "seguir trabajando" y que la empresa cumpla lo que prometió, que es la construcción de una motocicleta Burgman "de lujo" en la planta gijonesa.

Según ha recalcado, la situación es "crítica", pero "nada es imposible" y a pesar de que es "muy complicado" que la moto se produzca en Gijón, "hay que intentarlo".

"Es lo que nos queda, pelear para que la fábrica no cierre y para que no se pierda ningún puesto de trabajo", ha reseñado.

Otra representante del comité de empresa, Cristina García, ha advertido de que los trabajadores se enteraron de la noticia del cierre a través de los medios de comunicación y que la decisión afectará en gran medida a la industria auxiliar.

En este sentido, ha adelantado que muchas empresas y pequeños talleres que trabajan para Suzuki están empezando a plantear expedientes de regulación de empleo y cierres.

Los trabajadores han tildado de "lamentables" las declaraciones de la patronal en este asunto y han manifestado que "no se puede jugar con la sensibilidad de las familias".

Respecto al problema de los costes estiman que con voluntad se podría solucionar y han aclarado que el valor del trabajo incorporado al precio final de la moto es solo un diez por ciento.

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