Madrid. Gómez dice que la denegación de 20.000 millones de crédito convierte en “papel mojado” el acuerdo de aguirre con los bancos


El candidato socialista a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, Tomás Gómez, calificó hoy de “papel mojado” el acuerdo alcanzado entre la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, y los bancos para agilizar la financiación a los emprendedores, puesto que la realidad es que el crédito solvente denegado asciende a 20.000 millones de euros.
Dijo que esos acuerdos que Aguirre “se esfuerza en vender como ayuda a las Pymes y a la industria, ha sido papel mojado porque luego las condiciones impuestas por las entidades financieras a las empresas que han intentado acceder a condiciones supuestamente preferentes para concesión de los préstamos han sido durísimas en avales”.
“No ha llegado liquidez al mercado”, aseguró Gómez, quien indicó que “en Madrid se han denegado más de 20.000 millones de euros de crédito solvente, es decir, que se hubiesen devuelto sin dificultad”.
Gómez, que hizo estas declaraciones tras una visita a una empresa de tecnología ubicada en Leganés, afirmó que “en este momento se está produciendo crecimiento sin crédito, lo que supone que hay condiciones en la economía real para empezar a avanzar pero hay un problema de liquidez”.
Dijo que “hacen falta instituciones financieras públicas en Madrid capaces de inyectar liquidez y capaces de amortiguar los efectos de las crisis financieras” y propuso “respaldar la labor de empresas como ésta, que ofrecen empleo de calidad y cualificado”.
“El valor añadido que hay que incorporar a Madrid es contar con empresas como ésta. Empresas que son el futuro pero hoy ya son el presente”, señaló Gómez, quien dijo que hay que “establecer y eliminar las barreras de financiación y apoyar una Ley de Industria con el objetivo de tener más suelo industrial disponible en Madrid”.
Pidió la creación de un banco público, al estilo del Banco Europeo de Inversiones o de otras iniciativas que se han dado en Europa y consideró que “cuando los bancos privados tienen dificultades, todos, del dinero de nuestros bolsillos les ponemos los recursos. Ahora, los ciudadanos queremos también que una parte de la banca sea pública, para que amortigüe esas situaciones y sirva para la recuperación económica autónomos, innovación, investigación y desarrollo”.

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