"Tendré que verlo para poder analizarlo. Es un partido que nos ha costado desde el inicio y nos ha costado generar ocasiones. Ellos han optado por replegarse al principio. Nosotros hemos tenido alguna para adelantarnos, pero no ha sido así y se han adelantado. Han salido bien al contragolpe y nos han cerrado bien los espacios...", comentó en declaraciones a la televisión del club.
Pese al resultado de la primera mitad, el técnico confiaba en cambiar las cosas, pero no salió todo como imaginaba. "En el inicio de la segunda parte hemos podido igualar, creía que íbamos a entrar en una buena dinámica de juego, pero no ha sido así. Ha sido intermitente y nos ha costado", dijo.
"Todos estos datos hay que verlos desde la globalidad. Somos sólidos en ese aspecto y no hay que dar mayor importancia", añadió Luis Enrique sobre los dos goles encajados a balón parado y antes de ser preguntado por si afectó al equipo el partido ante el PSG del pasado miércoles.
"Un estado de euforia es mejor que uno de pesimismo. Sabíamos de esa dificultad. He visto al equipo con intención de superarlo e intentarlo, otra cosa es que luego hayamos podido o no", señaló en la rueda de prensa posterior a un choque del que preveía dificultad "máxima".
"Preveía dificultad máxima como cada jornada de Liga. Sé de la dificultad de ganar cualquier partido y en el tramo final contra equipos que necesitan los puntos es un hándicap no solo para nosotros, sino también para nuestros rivales", finalizó.
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