Acusados por crímenes de Plan Cóndor piden justicia en víspera de sentencia

Buenos Aires.- Dos de los cuatro acusados en el juicio que se sigue en Argentina por los crímenes cometidos en la antigua cárcel clandestina "Automotores Orletti" pidieron hoy al tribunal que "se haga justicia", horas antes de la lectura de la sentencia, que mantiene "en vilo" a entidades humanitarias.

En sus palabras previas a conocerse el veredicto, el que fuera miembro de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) Horacio Martínez Ruiz y el ex agente civil de inteligencia del Ejército Eduardo Ruffo manifestaron también su agradecimiento a los jueces del Tribunal Oral Federal Uno (TOF1) que llevaron adelante el proceso por los delitos cometidos en el centro, considerado una pieza clave de la represión coordinada en el Cono Sur durante los años 70.

El tribunal dará a conocer este jueves el veredicto del juicio llevado adelante por delitos cometidos en perjuicio de 65 víctimas que pasaron por el centro clandestino de detención del barrio porteño de Floresta, enmarcado en el "Plan Cóndor", como se denomina a la represión de las dictaduras de Argentina, Brasil, Bolivia, Chile, Paraguay y Perú.

"Vamos a estar presentes en la sala de audiencias varias organizaciones porque vamos a compartir otro día histórico en el que se hace justicia por vías legales y no por mano propia", señaló a Efe la líder de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Taty Almeida.

Para la dirigente de la organización humanitaria, este juicio "es muy importante; demostró lo que fue el Plan Cóndor y los crímenes cometidos contra numerosos uruguayos".

La sentencia será seguida por diversas organizaciones humanitarias como H.I.J.O.S., cuyos padres fueron asesinados durante la dictadura militar argentina y muchos permanecen desaparecidos.

En el banquillo de los acusados también se encuentran el excoronel Eduardo Cabanillas y el ex agente civil de inteligencia del Ejército Raúl Guglielminetti, quien posteriormente dirigió el cuerpo de seguridad del fallecido expresidente Raúl Alfonsín (1983-1989).

Había un quinto acusado, el exmilitar argentino Rubén Visuara, quien murió a comienzos de febrero pasado en una clínica de las afueras de Buenos Aires.

La fiscalía pidió en sus alegatos la pena de prisión perpetua para Cabanillas y 25 años para Martínez Ruiz, Guglielminetti y Ruffo, a quienes se les acusa de los delitos de privación ilegal de la libertad, imposición de tormentos y homicidio calificado, precisó el Centro de Información Judicial.

La cárcel ilegal de "Automotores Orletti" funcionó bajo la fachada de un taller mecánico entre mayo y noviembre de 1976, en plena dictadura militar argentina (1976-1983), que tuvo un saldo de 30.000 desaparecidos.