A pocas horas del 14-F

El triple empate amenaza con el bloqueo institucional y tensa la víspera electoral

Los candidatos se reúnen en la tradicional fotografía para los medios y después de una campaña marcada por los vetos cruzados y las anomalías. La Generalitat da por hecho que se formarán las mesas suficientes.  

Los nueve candidatos a la Generalitat de Cataluña, en la tradicional foto conjunta de la víspera.
Los nueve candidatos a la Generalitat de Cataluña, en la tradicional foto conjunta de la víspera.
Efe

De anomalía en anomalía. Ya fuera por una pandemia que cuestionó incluso que puedan abrir las mesas electorales, que se haya pulverizado el voto por correo o por las declaraciones más o menos electoralistas de unos y otros. También de tensión en tensión. La que se disparó cuando todos los partidos que concurren a las elecciones en Cataluña que se celebran este domingo quisieron retrasar justo eso, la fecha, excepto el PSC del exministro de Sanidad, Salvador Illa. Desde aquella refriega que tuvo que venir la justicia a desenredar, la campaña se ha desarrollado entre la crispación y el enfrentamiento absoluto entre todos los candidatos. 

De fondo, las encuestas apuntan a un triple empate entre ERC, JxCat y PSC que, desde luego, aleja a cualquiera de las tres de alcanzar la mayoría absoluta de los 68 escaños. Y con ese mal augurio, todos temen que el bloqueo institucional se alargue, si se atiende lo que ha defendido cada uno durante estas últimas semanas. Nadie quiere gobernar con nadie y la repetición de comicios, con lo que conlleva de inestabilidad, se ha ganado un puesto en el centro de del debate. 

Lo que sí parece seguro es que se podrá votar, tal y como acaba de confirmar la Generalitat a mediodía del sábado, que ha dado por hecho que el 99,9% de las mesas se formarán con la información que maneja de confirmación de sus miembros titulares o suplentes. A partir de aquí, también es seguro que los resultados de estos comicios dejarán el Parlament más fragmentado de la historia con ocho o nueve partidos diferentes con la irrupción de Vox (y la posibilidad de alzarse como el partido de derecha con más votos) y la eventual entrada del PDeCAT. Sobre la mesa hay varias opciones de gobierno: repetir un Govern de Junts y ERC, incluso sumando a la CUP; un tripartito entre ERC, PSC y comuns -tanto republicanos como socialistas lo han descartado-; un gobierno sin independentistas liderado por el PSC, aunque los socialistas han dicho que no aceptarán los votos de Vox; el Govern amplio que plantea ERC con Junts, comuns, CUP y PDeCAT -aunque hay vetos mutuos entre ellos-, e incluso un Ejecutivo en solitario o en minoría, aunque se antoja difícil.

Hacía años, por tanto, que en Cataluña no se veía una campaña tan tensa como la del 14F. Pero siempre hay un momento de respiro y, una vez más, la jornada de reflexión ha permitido la tregua. También víspera del Día de San Valentín, los nueve candidatos en liza a la Generalitat han recordado, gracias a la foto convocada por la Agencia Efe, al que durante décadas se definió en tono positivo como el "oasis catalán". Los arcos de la fachada principal del Parlament de Cataluña, edificio que se erigió a principios del siglo XVIII como arsenal para la fortaleza de la Ciutadella, han sido testigos de la primera foto de grupo de los candidatos en jornada de reflexión con mascarilla y distancia social, los signos de estos tiempos de fatiga pandémica.

El mejor ejemplo del impacto que ya ha dejado la pandemia es un récord. El voto por correo para el 14F en Cataluña ha alcanzado la cifra más alta desde las primeras elecciones autonómicas de 1980, con más de 284.000 sufragios emitidos por este sistema, lo que representa además un aumento del 350% con respecto a los comicios de 2017, según ha estimado la Generalitat. Se trata de una cifra récord, la más alta en la historia reciente de la democracia desde las primeras autonómicas de 1980 tras la aprobación del Estatut de 1979.

Igualmente de récord será el despliegue de seguridad, ya que un total de 14.200 agentes de los Mossos d'Esquadra y de las policías locales controlarán la seguridad durante la jornada del 14F, en su mayor dispositivo para unas elecciones por lo que por primera vez habrá un binomio de agentes todo el día en cada colegio. En concreto, en el marco del dispositivo "Escó 21", l domingo se movilizarán un total de 10.200 agentes de los Mossos d'Esquadra y 4.000 de las policías locales, a los que la Generalitat ha acordado aumentar su retribución de los 36 euros brutos previstos inicialmente a los 152 euros.

A diferencia de lo que ha ocurrido hasta ahora en las elecciones celebradas en Cataluña desde la restauración de la democracia, el 14F las patrullas no serán dinámicas ni se moverán por el territorio para controlar varios colegios electorales a la vez, sino que, debido a la especial situación por la pandemia del coronavirus, serán estáticas, con un binomio que cubrirá -por turnos- cada uno de los 2.763 colegios electorales durante todo el día.

Relato de una imagen

Una fatiga, la de 15 días de la campaña más dura e insólita vivida en Cataluña, que los propios nueve candidatos comentaban en los corrillos previos. El primero en llegar a la cita, en coche y un cuarto de hora antes de las 9 horas, ha sido el candidato de ERC y vicepresidente del Govern, Pere Aragonès, al que ha seguido, ya a pie y tras tomar café en un bar cercano, la cupera Dolors Sabater. Pocos minutos antes de la hora pactada han ido llegando, casi al unísono, los candidatos constitucionalistas Alejandro Fernández (PPC), Salvador Illa (PSC) y Carlos Carrizosa (Ciudadanos).

Illa, con una americana verde esperanza, ha sido el único candidato -ni siquiera Aragonès- que ha llegado con corbata a la primera de las tres fotos que los dirigentes tenían hoy agendadas para esta fresca mañana de febrero. Un poco ya a la carrera ha aparecido Jéssica Albiach, que se ha reunido enseguida con Aragonès y Sabater para dar apoyo a una plataforma antifascista que buscaba la firma de sus candidatos predilectos. En un gesto que no sabemos si tendrá continuidad tras el 14F, el corrillo se ha agrandado y a estos tres dirigentes se han sumado Illa, Carrizosa y Fernández, que han escuchado a la joven Albiach sus deseos de llegar a la tarde para estirarse en el sofá de su casa: "Esto es un morir....".

Al minuto se ha sumado, con su elegante chaqueta azul eléctrico, la candidata del PDeCAT, Àngels Chacón, y el oasis se ha ampliado sumándose "in extremis" el candidato de Vox, Ignacio Garriga, solo saludado cordialmente por algunos de sus compañeros de campaña. El momento de buen rollo y risas ha sido cuando Chacón explicaba en tono de broma sus esfuerzos, basados en el "elemento emocional", para conseguir el voto de su único hijo mayor de edad. "Ah, ¿pero has conseguido que te vote?", ha deslizado un siempre bromista Fernández. Borràs ha llegado la última a la cita.

Mostrar comentarios