Condenado por violar a peregrina tiene pendientes otros dos casos en Palencia

Palencia, 10 ene.- El hombre de 31 años condenado por la Audiencia Provincial de León a seis años de prisión como autor de una agresión sexual a una peregrina estadounidense ocurrida el 10 de mayo de 2011 está imputado por otros dos hechos similares en Palencia.

Fuentes judiciales han informado a EFE de que el condenado, I.F.F, natural de Valladolid aunque residente en la provincia de Palencia, fue detenido en mayo de 2011 como presunto autor de tres agresiones sexuales a tres peregrinas extranjeras cuando recorrían el Camino de Santiago a su paso por las provincias de Palencia y León.

Su detención se produjo en el marco de la 'Operación Peregrina', puesta en marcha en febrero de 2011 por las Comandancias de León y Palencia, con la finalidad de detener y poner a disposición judicial al presunto autor de dichas agresiones sexuales ocurridas en la ruta jacobea.

La primera se produjo el 4 de febrero de 2011 en las inmediaciones de la localidad palentina de Frómista y de ella fue objeto una peregrina de nacionalidad coreana, de 36 años.

Asimismo, el 16 de febrero una mujer de origen alemán, de 36 años, fue objeto de otra agresión sexual en las inmediaciones de la localidad palentina de Calzadilla de la Cueza.

Ambos casos son actualmente instruidos por los Juzgados de Palencia.

La última agresión se produjo el día 10 de mayo de 2011, en las inmediaciones de la localidad de Villamarco, en la provincia de León, y en este caso la víctima fue una joven estadounidense de 26 años cuyo caso ha sido juzgado y sentenciado ahora por la Audiencia Provincial de León.

Según distintas fuentes, las investigaciones resultaron complejas debido a la forma de actuar del autor, así como por lo espaciado de las agresiones, que se vieron dificultadas al residir las víctimas en el extranjero.

La Audiencia Provincial de León, en la sentencia que puede ser recurrida en casación ante el Tribunal Supremo y la que ha tenido acceso EFE, le ha impuesto además libertad vigilada que se ejecutará con posterioridad a la de prisión, y a que indemnice a su víctima en 240 euros por lesiones y otros 6.000 euros por daños morales.

El tribunal ha considerado como "creíbles, verosímiles y congruentes, sin contradicciones", las aportaciones testificales de la víctima.