Escritora colombiana recela de proceso paz por estar "a espaldas del país"

  • La escritora colombiana Laura Restrepo expresó hoy su recelo con el proceso de paz entre el Gobierno de Juan Manuel Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) porque está sucediendo "muy a espaldas del país".

México, 29 may.- La escritora colombiana Laura Restrepo expresó hoy su recelo con el proceso de paz entre el Gobierno de Juan Manuel Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) porque está sucediendo "muy a espaldas del país".

"Yo vengo de Colombia. En general la gente no tenía ni idea de qué estaba pasando allá adentro y no se sentía involucrada. (Decían) '¡ay, qué bueno que se acaba el secuestro!'", pero no se siente que el país esté pasando por "la gran aventura democrática que se vivió en procesos de paz pasados", explicó la escritora a Efe.

En una entrevista celebrada en su casa a propósito del lanzamiento en México de su última novela, "Hot sur" (Planeta, 2013), Restrepo reconoció que desconoce aún "los contenidos" concretos del acuerdo de tierras alcanzado el pasado 26 de mayo en Cuba entre las FARC y el Gobierno para profundizar más en ello.

"Desde luego todo acuerdo y todo proceso de paz es de saludar, eso es lo primero. Es mucho mejor que lo haya a que no", reconoció.

Sin embargo, la autora (Bogotá, 1950) teme que la falta de una participación más activa de los colombianos en el proceso impida que este sea aprovechado para promover "una gran transformación democrática".

Siente que eso no está sucediendo y responsabiliza en buena medida de ello a Juan Manuel Santos.

"Del presidente Santos, ¡cómo vas a esperar un proceso de paz que termine en una apertura democrática, si él no es eso, él no es eso! Vamos a ver. Uno no puede echar mal fario a un proceso de paz, hay que decir que se lo saluda, pero sí se pueden decir los temores que se tienen frente a este en particular", señaló.

Exguerrillera del M-19 e integrante de la comisión negociadora para la paz instalada en 1982 entre el Gobierno colombiano y ese grupo armado, durante el mandato de Belisario Betancur, lamentó que esta vez la búsqueda de paz esté ocurriendo "a puerta cerrada".

La negociación debería encaminarse no solo a "mejorar las circunstancias de la guerrilla o del Gobierno, sino del país mismo, en el sentido de avances democráticos importantes, radicales", apuntó.

Destacó que "un proceso de paz tiene que ser un proceso de perdón, (...) la visión de que el futuro, lo que la paz depara, va a ser tan importante que vale la pena perdonar los agravios, que en este caso han sido gravísimos".

Sin una mayor cercanía social al proceso, la escritora teme que los acuerdos que se logren sean insuficientes para cerrar las heridas abiertas en ofensas "gravísimas" como las vinculadas con los secuestros cometidos por las FARC durante varias décadas.

"¿Qué va a pasar con la gente que se desarme y pretenda reintegrarse a la sociedad, una sociedad que no ha vivido en carne propia el proceso de paz? Pues van a acabar todos muertos. Eso es como de bola a bola (muy fácil), ¿cierto?", comentó.

Para la escritora afincada en México hace tres décadas, el proceso de paz en el que participó, tras el cual recibió amenazas de muerte que la obligaron a partir al exilio, fue "una negociación con la guerrilla", pero al mismo tiempo "con todo el país".

La prueba es que desemboca "en un proceso constituyente en el que participan todas las fracciones y sectores. Eso lleva al gran hito democrático de la vida colombiana, que es la Constitución de 1991", indicó. "Eso sería como el ideal de un proceso de paz", añadió.

El actual diálogo de paz continuará en La Habana el 11 de julio para debatir el segundo punto de la agenda: la posible participación política de la guerrilla cuando se alcance la paz.

Los cultivos ilícitos, las víctimas del conflicto y la implementación de los acuerdos completan los cinco puntos acordados por las partes.

Mostrar comentarios