FIAB: La industria alimentaria ve "inaceptable" el fraude de la carne equina

Madrid, 25 feb.- La Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB) ha calificado hoy de "inaceptable" la aparición en España de material genético (ADN) de caballo en productos cárnicos elaborados, etiquetados de forma incorrecta.

En un comunicado, ha recordado que "se trata de un caso de fraude en el etiquetado" que no afecta a la seguridad alimentaria ni implica riesgo para la salud, tal como han indicado las autoridades.

"Un serio caso de fraude que la industria de alimentación y bebidas no puede tolerar", ha recalcado la Federación.

En este contexto, la FIAB ha mostrado "su apoyo y colaboración" a las investigaciones puestas en marcha por las autoridades comunitarias y españolas.

Ha pedido que este incidente "no ponga en duda la reputación de una industria que cuenta con estrictos y sólidos sistemas de trazabilidad" para garantizar la seguridad y calidad de los productos que pone en el mercado "de acuerdo con la legislación comunitaria aplicable".

Esta federación ha añadido que "está colaborando estrechamente" con las autoridades españolas y europeas, además, con el objetivo de que "sea posible una rápida identificación del origen y de las personas implicadas en este fraude, de tal manera que la situación se normalice de forma inmediata".

"Se están realizando autocontroles adicionales en las industrias" -ha añadido- y "desde las organizaciones sectoriales se ha instado a las empresas a trabajar conjuntamente con sus proveedores para reforzar los controles en las cadenas de suministro".

De igual modo, la FIAB "está en permanente contacto con FoodDrinkEurope, la patronal europea del sector de la alimentación, quien coordina la relación con las autoridades de la Unión Europea".

Según ha recordado, el pasado 15 de enero la FSAI (Agencia de Seguridad Alimentaria Irlandesa) detectó un posible fraude en productos cárnicos etiquetados de forma incorrecta, cuyo origen supuestamente estaba en Polonia y Rumanía.

Después se identificaron otros países involucrados, Irlanda, Reino Unido, Luxemburgo, Francia, Holanda y Suecia, con lo que el problema adquirió "una dimensión comunitaria, desde cuyo nivel están actuando todas las autoridades", ha concluido la FIAB.