Leguina afirma que los errores del Estado permitieron crecer las aspiraciones de Mas

El que fuera primer presidente de la Comunidad de Madrid, Joaquín Leguina (PSOE), ha asegurado que los "gravísimos errores" cometidos por el Estado desde siempre, han permitido que se hicieran "mangas y capirotes del Pacto Constitucional" y crecieran las aspiraciones de Artur Mas.

"Han sido desleales hasta el fondo y se les ha permitido", ha dicho Leguina en una entrevista con motivo de la publicación de su libro "Los 10 mitos del nacionalismo catalán", en el que explica detalladamente que este nacionalismo carece de argumentos y son todo sentimientos.

En opinión de Leguina, Mas "ha puesto una maquinaria en marcha", que se "le va a llevar" por delante, porque el futuro político que le espera es el "cementerio" ya que "se ha equivocado creyéndose su propio liderazgo", y encima ahora le ha salido un "padre político" que era un "ladrón", en referencia a Jordi Pujol,

Mientras el nacionalismo catalán avanzaba en sus aspiraciones independentistas, ha asegurado Leguina, todos los gobiernos de la democracia "desde Suárez hasta Rajoy" han optado por la "dejación", mirando para "otro lado".

El expresidente madrileño ha insistido en que "el nacionalismo catalán carece de argumentos serios" porque "son todos sentimientos" y "los sentimientos y el argumentario racional se llevan por lo general mal", ya que es "difícil ponerse de acuerdo con alguien que cree que es superior y que no tiene nada que ver con el resto de españoles".

"La prueba definitiva del juego mentiroso del nacionalismo catalán es que la ley de consultas se titula ley de consultas no referendarias y apoyándose en una ley que dice no referirse a los referendos, al día siguiente Mas convoca uno", ha dicho Leguina.

Ha señalado que se trata del "juego perverso de siempre" y lo que Mas llama "derecho a decidir, se llama derecho de autodeterminación", un derecho que Cataluña no tiene porque eso es "para las colonias que se convirtieron en países independientes".

Según Leguina mientras el Estado no ejercía sus obligaciones, se estaba montando "todo el tinglado" desde "las escuelas, la universidad y desde los medios de comunicación, públicos y privados".

"El culmen fue el Estatuto catalán puesto en marcha por Zapatero y Maragall", que fue un "puro disparate", ha subrayado.

Leguina ha considerado que Rajoy debería haber cambiado el sistema de financiación desde el primer día porque no se puede justificar un modelo en el que algunas comunidades reciban mil euros más per cápita que otras, y ha asegurado que mientras Madrid, junto a Baleares son las "grandes maltratadas", Cataluña ha extendido el mito de "España nos roba".

La dinámica puesta en marcha por los nacionalistas llevará, según Leguina, a una crisis política en Cataluña, porque "de este barrizal" CiU va a salir "partida y disminuida".

Una vez que ello suceda, el expresidente madrileño cree que los catalanes, a los que califica de "gente normal", "tendrán que tomar decisiones porque ERC es un partido que les lleva directamente al abismo".

La salida que le queda a Mas para "olvidarse de este lío", ha apuntado, es convocar elecciones autonómicas y mantenerse en el Gobierno con el apoyo del PSC, pero ha reconocido que "no parece" que esas sean las intenciones del presidente de la Generalitat.

Leguina se ha referido también a la lengua y ha acusado a Mas de hacer la misma política contra el castellano que la que hacía Franco contra el catalán y eso se llama "persecución", y se ha preguntado: "¿Van a humillar, ofender, marginar a una generación en beneficio de qué?".

Preguntado por la dimisión esta semana del ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón -el que fuera su sucesor al frente de la Comunidad de Madrid-, tras retirar el presidente del Gobierno la reforma de la ley del aborto, Leguina ha dicho que la causa de la dimisión "viene de un error" de Rajoy.

Ha asegurado que el jefe del Ejecutivo se "empecinó" en poner en marcha un proyecto de ley en vez de haber esperado a que el Constitucional se pronunciara sobre el recurso que había presentado el Gobierno contra la ley de plazos hecha por Zapatero.

Si Rajoy hubiera esperado, a juicio de Leguina, quizás "el problema se le había arreglado y ahora no sería el pagano el ministro de Justicia", del que se ha mostrado convencido de que se recuperará de este varapalo porque "es un hombre activo y bastante optimista".

Tras lo ocurrido, Leguina saca la conclusión de que "no se puede decir siempre sí al jefe" porque al final "puede costar mucho más caro que decirle no".