Movimiento contra la Intolerancia pide a Moratinos una condena a Irán en la ONU

  • Madrid.- El presidente del Movimiento contra la Intolerancia, Esteban Ibarra, ha pedido al ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, un gesto de condena y que la delegación española abandone el auditorio de la ONU cuando intervenga el presidente de Irán, Mahmoud Ahmadineyad.

Movimiento contra la Intolerancia pide a Moratinos una condena a Irán en la ONU
Movimiento contra la Intolerancia pide a Moratinos una condena a Irán en la ONU

Madrid.- El presidente del Movimiento contra la Intolerancia, Esteban Ibarra, ha pedido al ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, un gesto de condena y que la delegación española abandone el auditorio de la ONU cuando intervenga el presidente de Irán, Mahmoud Ahmadineyad.

En una carta dirigida a Moratinos en la que expone la gravedad de la situación en Irán, exige "un compromiso público y expreso de las democracias en defensa de los derechos humanos".

Ibarra pide al ministro que "nuestra representación en Naciones Unidas adopte un gesto de condena" a las violaciones "muy graves de los derechos humanos" en Irán, y que requiera a los diplomáticos y representantes españoles presentes en la asamblea de Naciones Unidas, que "abandonen la sala cuando Mahmoud Ahmadineyad tome la palabra, como inequívoca señal de protesta".

En la carta del Movimiento por la Intolerancia muestra su "preocupación y queja" ante la próxima intervención, el 23 de septiembre, en la Asamblea de Naciones Unidas del Presidente de la República Islámica de Irán, Mahmoud Ahmadineyad, "por cuanto significa legitimar una práctica de vulneración muy grave de los derechos humanos así como desoír el sufrimiento de las víctimas y de ciudadanos que denuncian esa práctica".

Recuerda que "las atrocidades del régimen iraní son conocidas": ha consumado 350 ejecuciones al año de media (casi una ejecución diaria); es el país con más ejecuciones del mundo después de China, y, junto a Arabia Saudí, son los dos únicos países musulmanes con ejecuciones públicas.

Más de 4.000 homosexuales han sido ejecutados, en su mayoría mediante ahorcamiento en grúas, y hay ocho mujeres y dos hombres pendientes de lapidación, como el caso de Sakineh Ashtianí, condenada a morir lapidada.

Para Ibarra, "escuchar la voz de Ahmadineyad, significa transigir con estas violaciones de derechos humanos y con prácticas inhumanas muy frecuentes en Irán".

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