Pons dice que en la guerra del liderazgo, Chacón se pone medallas que son de Aznar

Madrid.- El dirigente del PP, Esteban González Pons, ha dicho hoy que "la guerra por el liderazgo en el PSOE está afectando a actos de Estado" y la ministra de Defensa, Carme Chacón, que nada tuvo que ver con la supresión de la "mili", se arroga "la medalla" que correspondería al expresidente Aznar, que la suprimió.

En rueda de prensa, González Pons ha expresado el malestar del partido por que al acto de celebración de los diez años de supresión del servicio militar "no hayan sido invitados el presidente del Gobierno que lo suprimió, José María Aznar, y el ministro de Defensa, Federico Trillo, que elaboró la ley".

Por ello, Pons ha insistido en que la ministra Chacón tenía que haber hecho hoy "un acto de Estado y no un acto de partido" para promocionarse como candidata a la Presidencia, y no haberse dejado fuera de la celebración a quienes realmente corresponde la iniciativa de supresión.

Según el dirigente popular, "Chacón con tal de ponerse medallas, es capaz de quitárselas a otros" y ha calificado de "feo, sectario y poco antidemocrático" excluir de los actos a Aznar y a Trillo, además de "impropio" de quien dirige y preside el Ejército de todos los españoles.

El dirigente popular ha explicado que cuando miembros de su partido llamaron al Ministerio pidiendo explicaciones por la exclusión del evento se les comunicó que era un "acto restringido, en el que se invitaba a la sociedad civil".

Ha precisado que sí han sido invitados al acto dos exministros de Defensa, que no fueron los que hicieron la ley, y los diputados de la Comisión de Defensa del Congreso y ha remarcado que hubiera sido una "cuestión de generosidad, voluntad y buen talante democrático" invitar al expresidente Aznar y al exministro Trillo.

"La supresión de la mili -ha dicho González Pons- es obra de todos, a todos benefició y todos coincidimos en que era buena".

González Pons ha recordado que cuando se suprimió el servicio militar en España, el PP hizo un acto de Estado, presidido por los reyes y al que se invitó a todas las fuerzas políticas, por considerar que la supresión de la "mili" era algo "de lo que todos podían enorgullecerse".