Los trabajadores españoles de Gibraltar: "Se avecinaba la catástrofe económica"

"Se avecinaba un drama económico de envergadura; una situación que, sumando los efectos de la pandemia, sería catastrófica". Todavía se desconocen los detalles del "principio de acuerdo" que España y Reino Unido alcanzaron este jueves para derribar la Verja pero Manuel Triano, secretario comarcal de CCOO en el Campo de Gibraltar, sabe bien las consecuencias que habría acarreado un 'Brexit duro'. Madrid y Londres lograron ayer un pacto 'in extremis' 12 horas antes de que se consumase la peor pesadilla de los 14.000 trabajadores -9.000 de ellos españoles- que cada día cruzan la frontera para trabajar en la colonia británica. El 'convenio' conlleva que se suprimen los controles entre Gibraltar y España y que se aplicará un régimen aduanero en materia de tráfico de mercancías y transporte.

"Ya había un acuerdo que garantizaba los derechos de los trabajadores transfronterizos pero la ausencia de un pacto que permitiera una movilidad en la Verja tendría un efecto muy negativo en la economía gibraltareña. Te encontrarías con trabajadores con derechos pero sin empleo. Además, una gran cantidad de trabajadores estaba fuera de ese acuerdo, empleados de empresas españolas cuya cartera de clientes está en Gibraltar y cuyo futuro seguía en el aire", explica Triano a La Información. Los datos hablan por sí solos: el 40% de las ventas de las pymes de la región son a clientes gibraltareños; una 'frontera dura' habría supuesto un desastre para las pequeñas y medianas empresas.

El principio de acuerdo, logrado "tras seis meses de trabajo intenso y dos noches en blanco" según la ministra de Exteriores Arancha González Laya, permite la aplicación en la colonia británica de políticas y programas de la Unión Europea (UE), como el acuerdo de Schengen, e incorpora "medidas de competencia leal" en lo fiscal, medioambiental y social. "Derribamos barreras para construir una zona de prosperidad compartida", destacó la jefa de la diplomacia española.

Tras cerrar el 'pacto' con el Reino Unido, España debe solicitar a la Unión Europea que éste se consolide en un tratado, que Laya prevé que esté listo en un plazo de seis meses. Lo acordado ya ha sido remitido a las autoridades europeas para que elaboren unas directrices de cara a la negociación del acuerdo sobre el Peñón. No obstante, recalcó Laya, "todo esto se hace sin perjuicio de las pretensiones irrenunciables" respecto a la soberanía de Gibraltar del Gobierno español, como también del Gobierno británico, "que han quedado salvaguardadas".

Euforia contenida: "Aún no sabemos el contenido del pacto" 

El "principio de acuerdo" anunciado a bombo y platillo por la titular de Exteriores ha sido recibido con euforia contenida entre los trabajadores 'afectados', tanto transfronterizos como residentes en el Peñón. "La noticia es un alivio pero creo que aún hay mucha incertidumbre, todavía no sabemos el contenido del acuerdo. Hasta entonces, habrá que esperar", explica a este diario Costa Montero, Director de Alimentación y Bebida del Hotel O'Callaghan Eliott, quien trabaja desde hace más de dos décadas en Gibraltar. 

Atenea Ruiz coincide. Vive en La Línea de la Concepción y cada día cruza la frontera para trabajar en el restaurante El Faro. Para ella, la Verja "es un símbolo". "El acuerdo me hace feliz, no es lo mismo tener una frontera con un Brexit duro que una frontera de libre tránsito, pero tenemos que esperar para saber cómo se llevará a cabo el acuerdo", opina.    

Hay, incluso, quien no está de acuerdo con el pacto. "Hubiera preferido que todo siguiese igual. Con los cambios nunca se sabe, y menos con algo tan complicado. Habrá que esperar para ver cómo funciona", señala Angela Traatts, recepcionista del Hotel Bristol de Gibraltar, que nació en Inglaterra y se mudó hace 20 años al Peñón. Traatts tampoco cree que esta medida ayude a la economía, ya que "el 98% de los clientes que tenemos en el hotel, vienen desde el Reino Unido y viajan en avión, y no por la frontera".

"El resto es pasar a una economía más complementaria"

Para aquellos a los que los árboles no les impiden ver el bosque, la noticia del principio de acuerdo solo puede ser positiva. "Aplicar el tratado Schengen viene a favorecer la cooperación económica. Podemos pasar de una economía muy dependiente de Gibraltar, sobre todo en la Línea de la Concepción (unas 20.000 personas de una población de 60.000), a una economía más complementaria. Ese es el reto", concluye el secretario comarcal de CCOO en el Campo de Gibraltar.